Ver anterior: LA GENERACIÓN DEL ´80
ACTIVIDAD:
1) Utilizá el cuadro para calcular: a) Cantidad total de inmigrantes entre 1880 y 1930 - b) Diferencia la cantidad de inmigrantes por nacionalidad en dicho período.
2) Elegí un barrio de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, investigá en la web cuáles fueron sus orígenes y redactá un breve informe de tu investigación.
Ver siguiente: EL MOVIMIENTO OBRERO
LA GRAN INMIGRACIÓN
Durante el último tercio del siglo XIX,
Argentina fue receptora de un constante flujo de inmigrantes, interrumpido solo
por acontecimientos muy puntuales como la crisis de 1890 o la Primera guerra
Mundial (1914-1918). Como consecuencia de la Revolución Industrial, casi 70
millones de personas abandonaron Europa. Cerca del 10 por ciento se radicaron
en la Argentina.
HOTEL DE LOS INMIGRANTES, BUENOS AIRES, 1912 |
¿Por qué vinieron? Se dieron una combinación
de factores que determinaron los flujos migratorios. Por un lado, las
condiciones dadas en los países de origen, denominados factores de expulsión:
desocupación masiva, bajos salarios, crisis políticas, etc. Por otro lado,
operaron los factores de atracción del país de destino: la Argentina ofrecía la
promesa de abundantes fuentes de trabajo, salarios más elevados, educación
pública para hijos de inmigrantes, y una sociedad dinámica donde el ascenso
social era posible. Entre 1880 y 1914 la gran inmigración forjó en nuestro país
una sociedad radicalmente nueva, transformando las estructuras sociales,
económicas, políticas y culturales. Para 1914, casi la mitad de los habitantes
de la ciudad de Buenos Aires eran extranjeros.
En un principio, la población inmigrante fue
esencialmente masculina y adulta; esto responde a las necesidades del mercado
laboral. Recién en las primeras décadas del siglo XX, la relación entre hombres
y mujeres inmigrantes comenzó a emparejarse. Si bien la población inmigratoria
provenía de casi todas las naciones europeas, la gran mayoría lo hacía de solo
dos países de origen: Italia y España. Como era de esperarse, la distribución
geográfica de los extranjeros no fue pareja, concentrándose la gran mayoría en
la región económica más dinámica: la Pampa húmeda. Buenos Aires, Santa Fe y
Entre Ríos congregaron el 87% del total de extranjeros. En las áreas urbanas, y
sobre todo en Buenos Aires, la construcción, los frigoríficos y los medios de
transporte proveían fuentes de trabajo alternativas a las áreas rurales.
EL CONVENTILLO, LA VIVIENDA DEL INMIGRANTE. |
Como la producción de cereales y carnes para
el mercado externo era más rentable a través de grandes latifundios, el acceso
de los inmigrantes a la propiedad rural fue muy limitado. Los grandes
terratenientes organizaban sus tierras en parcelas para ponerlas a producir. De
este modo se establecía un contrato de arrendamiento: cada parcela era
entregada a un inmigrante en alquiler para que la trabajara por un período de
tiempo determinado (usualmente eran 2 años). Así, el inmigrante se convertía en
un pequeño productor rural independiente que llevaba adelante las tareas
agrícolas, pero no era propietario de la tierra que trabajaba. Esta
imposibilidad de convertirse en propietario no favoreció en lo absoluto el
establecimiento de población en el área rural.
En Argentina, el proceso de urbanización se
encuentra estrechamente relacionado con el de la inmigración y con las
condiciones del mercado de trabajo. El afincamiento de un trabajador y su
familia dependía de una oferta de trabajo estable; que como vimos, el trabajo
rural usualmente no se lo proporcionaba. Así, la ciudad se le presentaba al
inmigrante como un hábitat posible y deseable para su radicación. Buenos Aires,
y en menos medida Rosario, fueron las ciudades que mayor flujo de inmigrantes
recibieron.
El crecimiento de la ciudad de Buenos Aires en este período fue
vertiginoso, convirtiéndose en una gran ciudad. La expansión se produjo del
centro hacia la periferia. La vivienda popular más difundida en el centro d la
ciudad era el conventillo. Sus habitantes eran trabajadores poco calificados,
que se desempeñaban en el puerto, en la construcción, o en fábricas y talleres
artesanales. Cada familia tenía acceso a una habitación propia y debía
compartir la cocina y el baño con otras. Hombres, mujeres, niñas y niños de
diferentes edades solían usar las mismas habitaciones en un clima de
hacinamiento y, a veces, de promiscuidad.
Con el correr del tiempo, se fueron
extendiendo los recorridos de los medios de transporte y abaratando el costo de
las tarifas. Así, cada estación de tren generaba un poblado, que más tarde daba
lugar a un barrio. Esto se combinó con otro proceso: la venta de lotes de
tierra en módicas cuotas, dando la posibilidad al inmigrante de abandonar el
conventillo y acceder al terreno para la construcción de la vivienda propia.
1) Utilizá el cuadro para calcular: a) Cantidad total de inmigrantes entre 1880 y 1930 - b) Diferencia la cantidad de inmigrantes por nacionalidad en dicho período.
2) Elegí un barrio de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, investigá en la web cuáles fueron sus orígenes y redactá un breve informe de tu investigación.
Ver siguiente: EL MOVIMIENTO OBRERO